jueves, 29 de octubre de 2009

Zombies en el mundo animal

Con el estreno de la película Zombieland, los zombies están en la escena principal. Ya escribí sobre los estudios científicos que se han hecho sobre ellos (sobre los zombies de la ficción), y pueden leer si quieren mi propia ficción Conspiración Zombie, pero ¿qué hay de los zombies en la naturaleza?

Sí, hay animales zombies. Sino miren esta foto que sigue.

ranas zombies

No se dejen engañar por la media sonrisa y los ojos despiertos, lo que están viendo son ranas zombies de ranas del bosque (Rana sylvatica). ¿Por qué son zombies? Porque tienen la habilidad de volver de la muerte, y convertirse entonces en muertas vivas. Pueden quedar congeladas, casi al 70 por ciento, o sea casi duras por completo durante al menos cuatro semanas, y volver como si nada. Tienen un anticongelante natural en su sangre, lo que les permite volver a la vida luego de pasar tanto tiempo congeladas.

¿No les pareció suficiente zombie esa rana? A ver qué les parece la hormiga de fuego.

image Estas hormigas son zombies con todas las letras. No, todas no, sólo algunas. Las que son infectadas con las larvas de la mosca de la fruta. Cuando esto ocurre la larva crece y se alimenta de la hormiga desde dentro, y la dominan a tal grado que cuando la larva está lista para salir, obliga a la hormiga a que se aleje decenas de metros de su colonia para evitar así un ataque de otras hormigas. La larva suele crecer en la cabeza de la hormiga, lo hace durante semanas, hasta que se come todo el cerebro y termina matando a su “anfitriona”.

Otros que vuelven a la vida son las arañas lobo o licósidas.

Se trata de una especie que habita en marismas de agua salada. Muchas veces estas arañas se inducen a un coma para poder sobrevivir durante unas 24 horas bajo el agua. Cuando pasan más de ese tiempo se mueren. Pero el tema es que… vuelven a la vida, luego.

Los científicos pensaban que se morían, pero descubrieron que luego de 40 horas bajo el agua, luego de secarse bien, volvieron a la vida sin más.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Las plantas diferencian entre sus hermanas y las rivales, y sólo compiten con las últimas

Si bien las plantas no pueden ver ni oír, pueden reconocer a los suyos, y ahora se ha descubierto cómo. Al parecer se valen de señales químicas secretadas por las raíces.

image Investigadores canadienses ya habían descubierto en 2007 que una planta llamadas rocas marinas, que crecen en la orilla del mar, reconocían a sus hermanas, o sea plantas crecidas a partir de semillas de la misma planta-madre.

Descubrieron que cuando las hermanas crecían cerca unas de otras en el suelo, se portaban bien y no competían por el suelo, no hacían crecer más raíces para el lado donde estaba la otra planta.

Pero si la que tenían creciendo al lado era una extraña, competían rápidametne haciendo crecer más raíces para aprovechar al máximo el agua y los nutrientes del suelo.

Ahora, investigadores de la Universidad de Delaware, Estados Unidos, quieren saber cómo es que estas plantas identifican a sus hermanas.

Estudiaron a las Arabidopsis thaliana en estado salvaje. Gracias a una serie de experimentos en los que las plantas eran expuestas a líquido conteniendo secreción de raíces, llamados exudantes, de sus hermanas, de extrañas, y sus propios exudantes.

Luego medían el largo de las raíces y de las hojas laterales. Una raíz lateral es aquella que se extiende horizontalmente a partir de una raíz primaria, que crece hacia abajo.

Las plantas expuestas a extraños, hacían crecer raíces laterales más largas, que las expuestas a sus hermanas. Y en cuanto a las hojas, cuando las que estaban al lado eran las hermanas, las hojas crecían normalmente, tocándose, e intercalándose. Pero si la que tenían cerca era una extraña, crecían hacia arriba para evitar tocarse.

La pregunta es cómo evitan competir las hermanas, ya que al estar cerca una de otra, esto les impide conseguir más nutrientes y crecer más. Pero los investigadores creen que las plantas que crecen juntas, equilibran la ingesta de nutrientes y no s vuelven “avaras”.

Fuente: Livescience

La araña que teje las telarañas circulares más grandes

BBC

Los investigadores la describen como un arácnido gigante capaz de tejer las mayores telarañas circulares del mundo. Su nombre científico es Nephila komaci y habita en África occidental y Madagascar.

image Este descubrimiento, publicado en la revista científica Plos One, es la primera confirmación de una especie nueva de este género de arañas en los últimos 130 años.

Según los expertos, las hembras de esta especie pueden alcanzar los 3,8 centímetros -12 con las patas incluidas- y llegan a tejer telarañas de hasta un metro de diámetro. Los ejemplares macho, en comparación, son mucho más pequeños.

El nuevo arácnido gigante fue identificado por Matjaz Kuntner, biólogo de la Academia Eslovena de las Ciencias y las Artes, y por su colega Jonathan Coddington, de la Institución Smithsoniana del Museo Nacional de Historia Natural de Washington DC.

El doctor Kuntner aseguró a la BBC que el descubrimiento es "muy inusual" porque las arañas del género Nephila están muy estudiadas y tienen un tamaño que hace difícil que pasen desapercibidas.

Sin embargo, esta especie es muy esquiva y ni siquiera el doctor Kuntner ha podido ver un ejemplar con vida.

La hembra gigante descrita en el artículo se encontraba en una colección propiedad del Instituto para la Investigación de las Plantas de Pretoria, en Sudáfrica. "Ese ejemplar no encajaba con ninguna de las especies descritas hasta la fecha", aseguró el doctor Kuntner.

En su investigación, Kuntner y su equipo examinaron más de 2.500 muestras procedentes de 37 museos. Al comprobar que no existía ningún ejemplar similar, los científicos pensaron que estaban ante una nueva especie, pero creyeron que podría haberse extinguido.

Poco después, un investigador sudafricano encontró tres ejemplares que encajaban con la descripción de la Nephila Komaci.

Esto permitió demostrar que la especie todavía existe, aunque los científicos temen que se encuentre seriamente amenazada.

"Su distribución está restringida y se encuentra en dos ecosistemas en peligro: Maputaland y Madagascar", apuntó el doctor Coddington. El hallazgo, aseguró Kuntner, es importante para la investigación de los arácnidos.

Los expertos esperan que el estudio de la nueva especie les ayude a descubrir las razones que hay detrás de la enorme diferencia de tamaño que existe entre las arañas Nephila hembra y las macho.

Según el doctor Kuntner, la teoría más extendida para explicar este hecho es que la presión evolutiva causó el "gigantismo". De este modo, apuntó el investigador, los cuerpos de las hembras son capaces de producir un número mayor de crías y garantizar la reproducción de la especie.

Los investigadores que describen una nueva especie tienen el derecho de elegir su nombre científico.

Cuando le preguntaron al doctor Kuntner el motivo que le llevó a dar el nombre de "komaci" al nuevo arácnido, el científico esloveno respondió que lo hizo en honor a su mejor amigo, el científico Andrej Komac, que murió recientemente en un accidente.

martes, 20 de octubre de 2009

Descubren árboles momificados de hace 800 años en Noruega

Las momias no son exclusivamente de los egipcios, ni tampoco de los humanos, las hay también de otros animales, pero lo más llamativo es que ahora han descubierto momias de árboles.

Pino que vivió entre 1334-1513

Son pinos momificados descubiertos en Noruega que tendrían entre 500 y 800 años de edad. Pero lo extraño es que en Noruega el clima suele ser muy húmedo, lo que hace que la materia orgánica, luego de morir, se descomponga rápidamente.

Sogndal es una de las regiones más húmedas de Noruega, ubicada en la costa suroeste de esta nación escandinava. Pero es allí donde se descubrieron las momias de árboles.

Baste aclarar que para que un organismo muerto se momifique de forma natural debe imperar un clima muy seco.

Los investigadores del Museo de Historia Natural y Arqueología de la Universidad Noruega de Ciencias estaban tomando muestras de árboles muertos para reconstruir la temperatura de los veranos en el oeste de Noruega, cuando se encontraron con árboles que parecían haber muerto recientemente, pero que en realidad lo habían hecho hacía al menos 500 años atrás.

Se trata de árboles que vivieron en el siglo XIII, y que murieron entre el año 1300 y el 1500. Según los científicos es algo extraordinario que hayan evitado la descomposición de la madera durante tantos años en un clima tan húmedo.

Según contaron los científicos noruegos, cuando un pino muere, secreta gran cantidad de resina, que puede disuadir la necesidad de los microorganismos de descomponer, o sea de biodegradar. Pero no es nada normal que esto ocurra durante siglos.

La resina de árbol es justamente uno de los ingredientes utilizados por los antiguos egipcios para momificar a sus muertos de forma artificial.

Fuente: ScienceDaily

Problemas para comprender la evolución

A veces los periodistas realmente me sorprenden. Quieren exprimir tanto una noticia, que divagan de tal forma sobre su propia ignorancia que terminan diciendo barbaridades que desinforman a la gente ya bastante desinformada sobre evolución.

En el periódico Público leemos:

Varios estudios demuestran que la caza y la pesca están potenciando una evolución tres veces más rápida de lo normal. Los expertos alertan de que sobrevive el más pequeño y débil.

También:

Darimont comparó el ritmo al que se están produciendo estos cambios al que podría esperarse con las leyes de Darwin en la mano. Son 3,4 veces más rápidos.

Esto lo escribe el periodista en relación a estudios científicos que nada tienen que ver con evolución ni con Darwin, pero claro, como es el año de Darwin hay que tratar de meterlo en algún lugar siempre.

Los estudios que se relatan en el artículo son sobre ecología, o sea cómo se está sobre pescando y sobre cazando a diversas especies, al grado de que se las está llevando a reducir su tamaño.

Cabe aclarar que no existen ningunas leyes de Darwin como para que uno las tenga en la mano, ni tampoco Darwin asentó algún número para la velocidad en que se producen los cambios, como para que se pueda decir que ahora es 3 veces más rápido. Lo que los científicos dicen que es 3,4 veces más rápido, y que se le escapó al periodista, es la velocidad en que se notan cambios de una a otra generación en los peces.

Pero no son cambios evolutivos, sino que es obvio que si se pesca a los más grandes siempre, cada vez hay menos, y los que siguen son más pequeños, es selección, pero no evolutiva, no es selección natural. Es selección artificial, la misma con la que hacemos a los perros más pequeñitos.

La prueba de que el hombre no está ascelerando ni produciendo selección natural (evolución), es que si dejamos de pescar, los peces volverán al tamaño que tenían antes, que es lo que dicen los autores de los estudios citados en el texto.

Y baste aclarar que la selección natural no selecciona al más fuerte, sino al más apto, así que en este caso no habría ningún cambio si así fuese, ya que se están seleccionando a los más aptos para poder reproducirse, o sea los más pequeños.