El cerdo hormiguero, extraño cazador de insectos

Si ve la imagen de abajo sin que yo les cuente nada, seguramente arriesgarán que es una cruza entre canguro y oso hormiguero, pero en realidad se trata de un cerdo hormiguero, también conocido como oricteropo. (video al final)

Imagen por Sexecutioner

Su nombre científico es Orycteropus afer, son similares a los osos hormigueros americanos, pero el cerdo hormiguero es nativo de África. Pero la similitud sólo se da en su alimento y la forma del hocico, ya que no son parientes, pertenecen a órdenes diferentes dentro de los mamíferos placentarios.

Pero como los osos hormigueros no son parientes de los osos, estos cerdos hormigueros tampoco tienen mucho que ver con los cerdos. El nombre proviene de que los primeros colonos de Sudáfrica, que eran holandeses, lo vieron parecido a un cerdo, y por eso el nombre (originalmente Aardvark, cerdo de tierra).

Aunque parezca extraño, están más relacionados con los elefantes que con los cerdos o los osos hormigueros.

El dato más llamativo es lo característico de sus dientes, lo que los hace tan especiales como para tener un orden para ellos solos: Tubulidentata. Los dientes comunes, los nuestros, por ejemplo, tienen una cavidad pulposa y tienen esmalte protector. Los de ellos tiene pequeños tubos dentro, sin esmalte. Al no tener protección, se gastan rápido. Pero a no preocuparse, que les crecen otros, continuamente.

El hocico es más parecido al de un cerdo que al de un oso hormiguero. Y de él sale una larga lengua estilo serpiente con una estructura muy elaborada, capaz de sentir “olor”. Y le ayuda al cerdo hormiguero a comer hasta 50 mil insectos al día.

Tienen garras muy fuertes, especialmente adaptadas para cavar posos, ya sea buscando alimento o para sus madrigueras, donde suelen pasar el día.

Las manos, o patas delanteras, tienen sólo cuatro dedos, pero las traseras tienen cinco. Llegan a medir unos entre 1,3 y 2 metros de largo, con una cola larga y fuerte al final de su cuerpo. Pesan entre 40 y 65 kilos.

Sus hábitos son nocturnos, suelen ser temerosos y solitarios. Es gracias a su excelente olfato que se guían para rastrear a terminas y hormigas, su alimento principal. Su oído también es muy fino, gracias a las largas y erguidas orejas.