viernes, 29 de octubre de 2010

Mono sin nariz alérgico a la lluvia

En Birmania, una nación del sudeste asiático, todavía hay extensas zonas de selva inexploradas por la ciencia. Allí, en los bosques motañosos, acaban de descubrir una nueva especie de mono de los más curioso: tiene la nariz hacia adentro, y según los locales esto le hace estornudar cuando llueve, entonces mete la cabeza entre las piernas cuando llueve para que no se le meta el agua en la nariz.

mono sin nariz

Esto según las historias populares de los habitantes de la región, ya que para la ciencia permanecen esquivos. Son tan raros que no han sido capturados, ni fotografiados con vida.

Los científicos calculan que habrá apenas unos 260 a 330 indivíduos de esta especie cuyo nombre científico es Rhinopithecus strykeri. Obviamente está en peligro de extinción al ser tan pocos, y al tenerse tan escasa información sobre ellos.

Para poder calcular cuantos son y, aunque no lo crean, para armar la foto de arriba, se han basado en los restos óseos de ellos que se descubren de vez en cuando los cazadores. La imagen de arriba fue hecha con photoshop.

Vía Nature

Gracias Jesús por pasar el dato (Según Jesús es parecido a Michael Jackson, y tiene razón!)

miércoles, 6 de octubre de 2010

Pez que amamanta a sus crías

BBC-LA Nacion

Científicos descubrieron un raro pez que amamanta a sus crías. Y lo más sorprendente es que éstas maman cuando son embriones dentro del cuerpo de la madre.

image Se sabe que los mamíferos amamantan a sus crías y les pasan nutrientes en la leche abastecida en las glándulas mamarias. Y este proceso ocurre cuando las crías nacen. Pero nunca se había visto el amamantamiento en los peces.

Ahora, biólogos de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, descubrieron que el raro pez zoarcido (Zoarces viviparus) utiliza folículos ováricos para amamantar a sus crías.

Esto, dicen los investigadores en Journal of Experimental Marine Biology and Ecology (Revista de Biología y Ecología Marina Experimental), podría explicar por qué esta especie puede dar a luz a tantas crías vivas y de tamaño tan grande.

La hembra puede tener entre 30 y 400 crías de entre 3 y 5 centímetros de largo. El zoarcido se encuentra cerca de las aguas costeras de grandes partes de Europa, desde el Canal de la Mancha hasta el Mar Báltico y el Mar Blanco en el océano Ártico.

Entre los peces, éste es el que pasa uno de los embarazos más largos, que puede durar hasta seis meses.

Además, suele parir durante el invierno cuando las temperaturas del agua son extremadamente frías. Otros peces, como el guppy y el molly, también dan a luz a crías muy desarrolladas.

Pero tienden a tener una gestación corta de sólo unas cuantas semanas y sus embriones se alimentan con el saco gestacional dentro del cuerpo de la madre.

Así que hasta ahora había sido un misterio cómo el zoarcido europeo alimentaba a sus crías, porque los sacos gestacionales no pueden sostener a los embriones que se desarrollan más de seis meses.

"Los mecanismos exactos del desarrollo de los jóvenes peces ha sido tema de investigaciones extensas durante el pasado medio siglo", explica el profesor Peter Skov, quien dirigió el estudio.

Folículos especiales. El profesor Skov y su equipo encontraron la respuesta de esa interrogante.

Descubrieron que los embriones del zoarcido maman. "Esto nunca antes había sido documentado en el zoarcido" dice el investigador. Los embriones realmente maman de folículos ováricos, ingiriendo nutrientes y gases de esas estructuras internas.

En los mamíferos, los folículos ováricos producen óvulos que después maduran a medida que pasan hacia el útero donde ocurre la fertilización.

Una vez en el útero el embrión obtiene nutrientes y oxígeno en la placenta por medio del cordón umbilical, y después del nacimiento continúa nutriéndose con el amamantamiento.

"En el zoarcido, el óvulo también es producido y madurado en el ovario con los folículos, igual que en los mamíferos" explica a la BBC el profesor Skov. "Pero la fertilización, y todo el periodo gestacional, se lleva a cabo allí mismo porque estos peces no tienen útero".

Después de que se han agotado las reservas del saco gestacional, los zoarcidos adhieren sus bocas a un folículo ovárico, el cual tiene un canal en su punta por la cual pueden fluir líquidos y nutrientes. Este fluido folicular es una fuente rica en proteínas, ácidos grasos y glucosa.

Y también está saturado de oxigeno, lo cual ayuda a ventilar las branquias del pez en desarrollo. Cada embrión se adhiere a un folículo único.

"Esto asegura una distribución igualitaria de nutrientes" dice el profesor Skov.

Los científicos llevaron a cabo el descubrimiento por accidente, cuando investigaban la fisiología de este pez.

El profesor Skov estaba haciendo una disección de una hembra embarazada muerta cuando descubrió a los embriones adheridos a los folículos ováricos.

"Nos quedamos totalmente sorprendidos con este hallazgo" dice el científico.

"Nuestro trabajo cambia lo que conocíamos sobre la reproducción de los zoarcidos, y quizás también se aplica a otros peces".

sábado, 18 de septiembre de 2010

Los murciélagos también tienen dialectos y acentos

Vía El Mundo:
No sólo las personas tienemos acentos diferentes. Según un equipo de científicos australianos, los murciélagos también se distinguen regionalmente por su forma de comunicarse entre ellos.
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Los diferentes 'dialectos' permiten a los investigadores identificar a las distintas especies, para poder así protegerlas.

El investigador Brad Law, del Centro de Ciencia Forestal australiano, advirtió que los murciélagos de los bosques de Nueva Gales del Sur, en Australia, emiten un sonido diferente del resto. Esto confirmaba las sospechas de que los murciélagos, al igual que otros animales como los delfines o los cachalotes, tenían diferentes tonos regionales. Para demostrarlo, los investigadores analizaron alrededor de 30 llamadas de distintas especies de murciélagos. A partir de dichos sonidos, desarrollaron un programa informático que permite identificar a estos mamíferos a lo largo de la costa, cuantificarlos y así protegerlos.

Los murciélagos emiten ultrasonidos de alta frecuencia para orientarse en el vuelo y cazar, inaudibles para el ser humano, mediante contracciones de la laringe. Estos sonidos pueden variar en frecuencia, ritmo, duración e intensidad según de la especie de la que se trate.

Recopilaron y estudiaron 4.000 sonidos de estos animales para crear un sistema capaz de desarrollar claves de identificación de los distintos 'acentos' de murciélagos que habitan en distintas regiones de Nueva Gales del Sur. Sin embargo aún se encuentran en la primera fase de investigación y deben perfeccionar algunos aspectos. "Necesitamos mejorar nuestra habilidad para distinguir entre especies que tienen el mismo tono de llamada y debemos aumentar la velocidad de identificación de estas llamadas", asegura Law.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Elefantes que le tienen miedo al as hormigas

EFE

Las acacias de Kenia tienen un gran aliado para defenderse de los elefantes, que las derribarían y devorarían sin piedad si no fuera por unas hormigas mil millones de veces más pequeñas que ellos.

elefante "Es una historia de David contra Goliat", señaló el biólogo Todd Palmer, autor principal de un estudio sobre el tema, que se publicado en la revista Current Biology.

Las columnas de hormigas enfurecidas disuaden a los paquidermos introduciéndose en su sensible trompa si se atreven a acercarse a las acacias, que a cambio de protección ofrecen a sus guardianes refugio y alimento en forma de dulce néctar.

Con ello, estos insectos tienen un importante impacto sobre el ecosistema de la sabana en la que viven, al proteger a unos árboles que son necesarios para absorber el dióxido de carbono y reducir así la acumulación de gases de efecto invernadero, señala el estudio.

Hasta ahora se creía que en la vegetación de la sabana influían la lluvia, los nutrientes del suelo, los herbívoros y el fuego, pero Palmer sugiere que a la lista se añada la defensa de las plantas ejercida por los insectos.

El papel clave de las hormigas

Los biólogos de la Universidad de Florida (EEUU) se dieron cuenta durante una investigación en el centro de Kenia de que los elefantes se apartaban de una variedad de acacia común en la zona, la 'Acacia drepanolobium' en la que proliferan estas hormigas, mientras se alimentaban de la 'Acacia mellifera' que está libre de estos insectos.

Tras realizar una prueba, descubrieron que "a los elefantes les gusta comer esas plantas (que habitualmente tienen hormigas) tanto como la 'Acacia mellifera'. Cuando en cualquiera de las dos especies hay hormigas las evitan como los niños evitan el brécol", señaló Palmer.

En otro experimento, los científicos eliminaron las hormigas de algunas acacias y comprobaron un año después que estos árboles habían sufrido muchos más daños que los demás. Imágenes por satélite tomados entre 2003 y 2008 confirmaron que las hormigas tenían un efecto generalizado a largo plazo sobre la sabana, explicó Palmer.

La trompa del elefante es muy sensible a las picaduras de las hormigas y es el auténtico 'talón de Aquiles' del gigantesco animal. Según Palmer, al parecer es el olor el que alerta a los elefantes de la presencia de las hormigas, por lo que estos olores podrían ser aplicados a los cultivos humanos para evitar que sean arrasados por los paquidermos.

La destrucción de los cultivos es una de las principales causas de que los elefantes sean abatidos por el hombre en el este de África.

jueves, 26 de agosto de 2010

Rana más pequeña del viejo mundo descubierta

Una de las ranas más pequeñas del mundo ha sido descubierta en los bosques de Borneo, en el Sudeste asiático.

rana diminuta

Esta rana diminuta, nombre científico Microhyla nepenthicola, mide apenas de 10 a 13 milímetros, y fue descubierta cerca de una montaña en el parque nacional Kubah.

El descubridor, Indraneil Das de la Universidad Sarawak de Malasia, dijo que había visto especímenes en museos de cien años de antigüedad, pero al parecer esos antiguos descubridores las confundieron con crías de otras especies.

El nombre científico le viene de una planta, la Nepenthes ampullaria, de la cual depende la supervivencia de la mini rana. La planta tiene una forma de cántaro en el cual se acumula agua. Allí la rana planta sus huevos y es donde crecen los renacuajos.

Uno se preguntará cómo es que los científicos pudieron descubrirlas siendo tan diminutas, y en un ambiente de vegetación tan tupida como es el bosque tropical de Borneo. La respuesta es mediante el canto. Este suele comenzar a la puesta del sol, con los machos acercándose a las plantas. El sonido es fuerte y áspero y dura apenas unos minutos, luego le sigue un breve intervalo de silencio, y vuelta a empezar. Puede durar hasta cerca del amanecer.

Detalles científicos fueron publicados en Zootaxa.

Fuente: Livescience y National Geographic

rana más pequeña

jueves, 22 de julio de 2010

Un mundo sin mosquitos

Los mosquitos son la tortura del verano en muchos países, y en otros la tortura de todo el año. Son transmisores de enfermedades que afectan a cientos de millones de personas cada año. Así es que más de uno habrá pensado por qué no nos deshacemos de ellos de una vez por todas. ¿Cómo sería el mundo sin mosquitos?

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No es tan sencillo, tenemos que mirar esto con una visión ecológica, una visión de conjunto. Un ecosistema es algo complejo, donde cada ser vivo depende de otro tanto para sobrevivir o para estar controlado y no volverse una plaga, y a la vez condenarse a la extinción al depredar a su presa.

Un ecosistema que no es molestado por la mano del hombre está siempre balanceado, quitar a los mosquitos de en medio podría traer terribles cambios a los ecosistemas de diversas partes del mundo. ¿Por qué? Nature le hizo la pregunta a diversos científicos para conocer su opinión.

Aquí en Natura Curiosa pudimos ver las curiosidades generales de los mosquitos, hay 3500 especies, si bien tan sólo algunos cientos de ellas nos pican a los humanos. Habitan casi todos los continentes tipos de hábitats. Por esto mismo son importantes para numerosos ecosistemas.

mosquito “Los mosquitos han estado en la Tierra por más de 100 millones de años”, dice Jittawadee Murphy, uno de los especialistas consultados por Nature. “Y han co evolucionado con muchas especies durante ese tiempo”.
Los mosquitos son comidos por muchos animales, desde otros insectos a reptiles, peces y aves.

Si los liquidásemos por completo, todos esos animales se quedarían sin su presa. Sin contar que los mosquitos también hacen de polinizadores para muchas plantas, que así se quedarían sin los encargados de facilitarles su reproducción.
Claro, un mundo sin Anopheles o Aedes, los transmisores de la malaria y el dengue respectivamente, sería mucho más seguro para nosotros los humanos.

Y algunos ecologistas sostienen que si bien los ecosistemas sentirían su falta, se adaptarían como lo hicieron ante otras especies extinguidas por el hombre.

Pero serían muchos los ecosistemas, y muchas las especies que sufrirían su desaparición. Por ejemplo la aves migratorias casi dependen de los mosquitos, podrían descender a más del 50% si no existiesen los mosquitos.

Otro ejemplo de cambio sería el ecosistema del ártico, donde una vez al año los mosquitos se transforman en nubes que pican sin cesar a los caribúes. Estos suelen realizar sus caminos por los valles de acuerdo al viento, para que los libre de los mosquitos.

Si no estuviesen los mosquitos que los obligan a ir buscando el viento, el suelo y la vegetación de muchos valles cambiaría por completo, ya que miles de caribúes migrando son algo importante. Sin contar con que cambiarían también los hábitos de los lobos, quienes se alimentan de los caribúes.

Hay un pez, el pez mosquito o Gambusia affinis, que está totalmente especializado en cazar mosquitos, tan bueno es haciéndolo que suelen tenerlo en estanques y campos de arroz para controlar a los mosquitos. Si desapareciesen los mosquitos se extinguirían, ya que están especialmente adaptados a alimentarse de estos insectos. Y al extinguirse se llevaría consigo a los peces que se alimentan de ellos.

En resumen, la cadena alimenticia se vería afectada en numerosos ecosistemas, con consecuencias que incluso son imposibles de prever. En Francia, por ejemplo, en el parque Camargue, se fumigó contra los mosquitos, y esto se vio reflejado en una baja en la población de aves, que pasaron a poner menos huevos, incluso.

El entomólogo Joe Conlon, de la Asociación para el Control del Mosquito de Estados Unidos, dice que “si erradicamos a los mosquitos, el ecosistema en el que ellos son activos tendrá un hipo y después seguirá con la vida. Algo mejor o peor tomará su lugar”.

Obviamente los ecosistemas se adaptan al daño, pero esa adaptación irá en función de que ese ecosistema quede balanceado, no en función de que nosotros los humanos quedemos satisfechos. Por eso extinguir especies produce efectos impredecibles en el ecosistema mundial, que pueden ser para mejor, como también para peor visto desde nuestra perspectiva.