Los pobres cocodrilos sólo quieren volver a su casa, pero no los dejan, y para ello les han colocado grandes imanes sobre la cabeza.
Se trata de cocodrilos que fueron vistos en zonas pobladas de Florida, y por ello fueron relocalizados muy lejos de allí, pero ellos siguen retornando a su hogar una y otra vez. Los biólogos del gobierno creen que encuentran su camino a casa siguiendo los campos magnéticos del planeta, de forma similar a la como se cree que hacen las aves migratorias.
Por eso para impedir que los pobres cocodrilos vuelvan, les colocan imanes en la cabeza, con la esperanza de que eso arruine la navegación interna de los cocodrilos.
Ellos sólo quieren volver a casa, han llegado a viajar 16 kilómetros por semana para volver. Antes si un cocodrilo volvía más de tres veces, lo enviaban a prisión, bueno, no, pero quedaba en cautividad. Ahora probarán esta nueva táctica que esperan que haga que el cocodrilo siga en estado salvaje, pero desorientado…
1 comentario:
Tengo una duda acerca de los imanes que son colocados para desorientar a los cocodrilos. A la larga no presentara un problema patológico al colocar los imanes a nivel cerebro o en su sinapsis?
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